“Un verdadero entendido no bebe vino, saborea sus secretos”
- Salvador Dalí

El artista español conocido por su talento para desnudar los secretos de la mente definió de esta manera la sensación que sentimos los amantes del vino cuando descorchamos una botella. La magia que a través de los sentidos nos logra trasladar a un tiempo, un lugar y una historia  en el pasado.


Mi historia de amor con el vino comenzó en 2014 cuando me fui a vivir a Toronto para perfeccionar mi inglés y vivir una nueva experiencia. Mi primera semana en la ciudad canadiense tuve la suerte de encontrar trabajo en un restaurante con un gran equipo donde hice muchos amigos apasionados por el vino y la gastronomía. Gracias al tiempo que compartí con ellos y al contacto diario con una gran bodega mi interés por el vino empezó a crecer.

A través de mi experiencia en Toronto en el sector de la hostelería aprendí a trasladar a los clientes las historias y el valor de los vinos que me fascinaban. En una copa de vino no sólo se descubre el sabor de un mosto fermentado de uva, sino una historia y a menudo el carácter y el alma de los bodegueros detrás de esa botella. Ser capaz de comunicar la esencia de un vino logra que la persona que lo bebe intensifique su experiencia y lo disfrute no solo con el paladar, sino también con la mente.

Mi formación en Comunicación y posterior especialización en Guión de Cine fue mi forma de descubrir mi interés y adicción por las aventuras e ideas con pulso propio. Al empezar a adentrarme en el mundo del vino, descubrí que muchos vinos son también son grandes historias embotelladas. Para entenderlas y disfrutarlas simplemente hay que entrenar nuestros otros sentidos: el olfato y el paladar, de la misma forma que utilizamos la vista para leer una novela o ver una película.

Este creciente entusiasmo se fue convirtiendo en mi carrera profesional. A través de los cursos The Wine & Spirit Education Trust (WSET),  entendí que el mundo del vino es tan extenso, complejo e interesante que una vez que se empieza a estudiar se convierte en una parte clave de la vida. Cuanto más aprendo, más consciente soy de lo mucho que me queda por saber.

Durante mis años en Canadá, pude ver que el interés por los vinos españoles y nuestra gastronomía creía año tras año. Esta realización me llevó a partir de 2017 a empezar una pequeña aventura creando una empresa de experiencias personalizadas en las regiones vinícolas de España. Ser la guía que da a conocer los tesoros e de nuestras distintas regiones me ha regalado grandes momentos y mucho aprendizaje.

En la actualidad estoy cursando el nivel 4 de WSET Diploma en Londres. Durante las semanas de clases presenciales, he tenido la oportunidad de conocer a estudiantes de todo el mundo y poder compartir distintas ideas y perspectivas de esta forma de arte: el proceso que empieza en la viña y termina en la copa.

En este blog me gustaría seguir siendo la guía que acerca a todos los enamorados del vino a las regiones, bodegas y vinos que me fascinan.

Todos sois bienvenidos a participar con vuestros comentarios y ojalá podamos convertir Pressing Affairs en un espacio de intercambio de ideas, sensaciones y emociones.